Con motivo de las campañas políticas de los aspirantes a la presidencia de Estados Unidos, se ha desatado el Marketing Político. Pero, ¿realmente en qué consiste?
El marketing político es la influencia que se puede lograr en los consumidores respecto al tema en cuestión: votar por ciertos candidatos o por otro tipos de asuntos públicos. Es decir, es el proceso mediante el cual los candidatos políticos y las ideas son dirigidas a los votantes en orden de satisfacer sus necesidades políticas y ganar su apoyo, según palabras del departamento de marketing de la Universidad Baruch de Nueva York.
Sin embargo, las reglas han cambiado. Los candidatos a la presidencia norteamericana ya no se enfrentan únicamente en el terreno político, sino que al mismo tiempo deben obtener el mayor apoyo en la red. Las redes sociales se han convertido en plataformas de conversación donde votantes como los millennials encuentran una forma de comunicar sus preocupaciones sociales, concentrándose en estos canales la mayor parte de su comunicación (el 78 por ciento de la población de Estados Unidos cuenta con un perfil de redes sociales, tal y como informan datos de Edison Research y Triton Digital).
Esta continua actividad en las redes es lo que hace que, tras momentos destacados como la celebración del debate, nuevas aclaraciones de los candidatos, entrevistas, etc., las reacciones no se hagan esperar y surjan tendencias, hashtags y conversaciones online a favor o en contra.
¿Quién de los dos tiene mejor estrategia digital?
Twitter: Hillary Clinton. Se unió a la red social en 2013 y cuenta con 9,22 millones de seguidores; Donald Trump. Se unió en 2009 y cuenta con 11,9 millones de seguidores.
Facebook: Hillary Clinton. Cuenta con 6.500.042 de likes. Además de haber completado toda su información biográfica, también cuenta con páginas oficiales y no oficiales que apoyan su campaña; Donald Trump. Cuenta con un mayor número de me gusta: 10.911.401. No tiene biografía y enlaza a sus seguidores a su sitio web oficial.
YouTube: Hillary Clinton. Se unió el 8 de abril de 2005. Cuenta con 77.814 suscriptores y 24.624.605 visualizaciones; Donald Trump. Se unió el 16 de marzo de 2015. Cuenta con 61.720 suscriptores y sus videos han tenido un impacto de 14.431.878 visualizaciones.
¿Cuál es el tono de su comunicación?
¿Qué caracteriza las campañas de cada uno?
Debido a la importancia del entretenimiento como recurso de mercadotecnia política, es importante que los candidatos u organizaciones políticas recurran a colaboraciones con personalidades de la industria de medios, para generar atención a través de la asociación de la imagen de estas personalidades con la del candidato o partido político. Y este es uno de los rasgos que caracterizan las campañas de Hillary: la colaboración de grandes celebridades del espectáculo como Elizabeth Banks, Mandy Moore, Meryl Streep o, incluso, el cantante mexicano Vicente Fernández, quien compuso “El corrido de Hillary Clinton” buscando el apoyo electoral para la candidata demócrata. Otras personalidades como Paul Simon, Lenny Kravitz, Alicia Keys, Demi Lovato y Lady Gaga ofrecieron presentaciones en apoyo a la candidata. La primera dama de Estados Unidos, Michelle Obama, es otra de las que participó en un acto de campaña de Hillary Clinton.
En cuanto al tono de comunicación, Hillary representa a alguien con experiencia política, que trabaja en base y ciñéndose a una estrategia; mientras que Donald Trump se erige como un hombre que rompe las reglas y actúa con emoción, siempre utilizando la improvisación (lo que le transmite cercanía al público).
Otro elemento que llama la atención es la espectacularidad con la que se comunican. Donald Trump se ha convertido en una marca, ha logrado convertir esta estrategia en un elemento clave de su campaña. A través de la gesticulación exagerada y su discurso ha generado simpatía con/a un gran sector de los electores.
Reacciones antes sus campañas, movimientos surgidos.
Dos campañas diferentes sobre una misma idea. Tecate y Aeroméxico lanzaron durante el debate dos campañas sobre el muro: la primera exalta el valor de la convivencia, representando el muro como una barra de un bar en la que conviven amigos de ambos lados de la frontera, mientras que la segunda habla sobre superar las barreras utilizando frases que Trump ha empleado a lo largo de su campaña e imágenes que impactan de la humanidad.
Concierto de Roger Waters. Los pasados 28 y 29 de septiembre, ante más de 50 mil personas en el Foro Sol, el cantante británico lanzó un duros mensajes en contra del candidato republicano. “Trump, eres un pendejo”, «No vamos a construir ese muro», fueron algunas de las afirmaciones que proyectó en las pantallas del recinto, así como caricaturas burlándose de él mientras cantaba el tema «Pigs».
Y así, infinidad de personajes públicos y marcas no se han resistido a posicionarse a favor o en contra de los candidatos, clamando su opinión en la red o eventos de gran impacto social.
Otras tácticas en su estrategia de marketing.
Con el fin de generar mayor identificación con segmentos de mercado electoral, los candidatos están llevando a cabo todo tipo de estrategias.
Un ejemplo de ello es que, dentro de sus campañas, están implementando cambios para aproximarse al segmento millennial (Hillary Clinton participó en la universidad Temple University) e hispano, dos mercados donde su reto es obtener una percepción positiva que les dé mayor posibilidad de victoria en las elecciones.
Pero, a fin de cuentas, ¿cuál es el objetivo de todas sus estrategias? Saber comunicar de tal forma que se logre influir en el mercado electoral. Así que ahora nada más nos queda esperar para ver cual de las dos tácticas tiene más éxito y, en consecuencia, impulsa a uno de los dos candidatos a ser elegido como presidente de Estados Unidos.