El buscador de Microsoft tardó en aparecer, primero como MSN Search (1998), después como Live Search (2006) y finalmente como Bing (2009).
Cuando llegó la última versión, Bing, se presentó con mucho marketing y publicidad como la posible alternativa a Google.
Google admitió incluso esa posibilidad: Eric Schmidt afirmó que el renovado buscador de Microsoft tenían novedades técnicas con las que ellos no contaban en ese momento: como el listado de sugerencias que incluyeron tiempo después.
Todo hacía presagiar un buen futuro para Bing, para el que se estaban creando muchas expectativas.
Sin embargo, dos años después no sólo no ha conseguido alcanzar a Google, sino que Yahoo le sigue de cerca. Las búsquedas mundiales se resumen así: 89,5% para Google, 4,8% Bing y 3,9% Yahoo.
Sólo cuatro de cada 100 búsquedas en internet se realizan con Bing y además la división de internet sigue perdiendo millones de euros (1.740 en 2010) y popularidad.
A pesar de estas cifras, sólo pocos días atrás el experto SEO Barry Schwartz, quien visitó Madrid para asistir a la Red Innova, afirmaba: «Bing está mejorando mucho. Es interesante probar todo y abrir la mente a experimentos como Wolfram Alpha, un buscador semántico».
Queda por tanto un hilo de esperanza para Bing, que en los últimos tiempos está redoblando esfuerzos para integrarse con terceros: Yahoo!, Hotmail, Facebook o algunos dispositivos móviles, que no sólo les reportan búsquedas, sino también ingresos por publicidad.